La economía estadounidense ha vertido un jarro de agua fría sobre los
mercados europeos, que disfrutaban de su primera jornada de
descompresión en varias semanas. Varios indicadores conocidos hoy
reflejan una desaceleración del crecimiento de la primera economía del
mundo en mayo que hace temer que la cifra de paro ese mes, que se
conocerá mañana, será peor de lo previsto. El número de solicitudes de
subsidios de desempleo aumentó en la semana finalizada el 26 de mayo más
de lo esperado y la actividad empresarial enfrió su expansión en mayo,
según refleja el índice de gestores de compras ISM-Chicago Inc., que
cedió a 52,7, su menor lectura desde septiembre de 2009, cuando se
esperaba un incremento.
Todas las Bolsas europeas han borrado las ganancias de la mañana y
han entrado en zona de números rojos tras conocer las cifras. El Ibex,
que llegó a anotarse una subida del 1,27% durante la mañana, ha
finalizado prácticamente sin cambios en 6.089,8 puntos, con un leve
retroceso del 0,01%. Londres ha arañado una subida del 0,8% y París del
0,59%. Fráncfort no ha conseguido mantenerse por encima del cierre de
ayer y ha cedido un 0,26% y tampoco Milán, que ha retrocedido un 0,14%. A
media sesión, Wall Street no salía del rojo: el Dow Jones caía un
0,35%, el S&P 500 un 0,76% y Nasdaq un 0,83%.
Tras la agitada jornada de ayer, en la que los mercados recibieron
noticias contradictorias sobre posibles soluciones a la crisis bancaria y
de la deuda soberana española -más unidas que nunca- la sesión ha
comenzado hoy con la misma presión sobre la prima de riesgo. Este
indicador de la solvencia de un país, medido como el exceso de
rentabilidad que los inversores exigen al bono a 10 años respecto al
alemán (que se considera inversión sin riesgo) se situaba en 540 puntos
básicos coincidiendo con la apertura bursátil, lo que impulsaba el tipo
del citado bono hasta el 6,7%. Hacia las 14.00, la prima se ha relajado
hasta 517 puntos básicos, pero las noticias de Estados Unidos la han
hecho remontar hasta finalizar el día en 536.
Tras seis jornadas consecutivas de caídas, la cotización de Bankia,
que ayer llegó a descender por debajo del euro, hoy se ha llegado a
disparar un 13%, aunque al cierre ha moderado el avance al 0,19%. Sacyr
Vallehermoso (-10,16%), Bankinter (-6,09%) e Indra (-5,83%) encabezan
las pérdidas del Ibex. FCC (+1,95%), Amadeus (+1,13%) y Santander
(+1,06%), las subidas.
Las dudas sobre la recapitalización de la banca española siguen
marcando la evolución de los mercados, que esperan que el Gobierno dé
pasos concretos en ese sentido. La extravagante nacionalización de
Bankia ha puesto en evidencia la incapacidad de asumir la inyección de
fondos necesaria (19.000 millones de euros, más 4.465 millones en
participaciones preferentes que se convertirán en acciones).
Pero ayer la Comisión Europea abrió una puerta a la
capitalización directa de los bancos europeos con recursos del fondo de rescate europeo
que entrará en vigor el próximo julio, el Mecanismo Europeo de
Estabilidad (MEDE). Ello evitaría al Estado español el recurso a un
mercado que le exige rendimientos prohibitivos. Hasta ahora solo estaba
previsto el recurso de los países al MEDE.
El comisario de Asuntos Económicos, Oli Rehn, se encargó de enfriar
el entusiasmo al precisar que, en los términos actuales, esa posibilidad
no es practicable de forma inmediata: "Los desembolsos directos a los
bancos no están previstos como tales en el tratado y, por tanto, no es
una opción disponible... en términos de capitalización directa", ha
asegurado.
Sin embargo, a pesar de que la solución definitiva no será inmediata,
la propuesta de la Comisión arroja un rayo de esperanza en los
vapuleados mercados de deuda periféricos. Hoy,
el
primer ministro italiano, Mario Monti, y el gobernador del Banco de
Italia, Ignazio Visco, expresaron su apoyo a una ayuda directa del MEDE
a los bancos y a la compra de bonos por parte del Banco Central Europeo
(BCE), frente a la conocida oposición del Gobierno de Angela Merkel.
Monti ha pedido a Alemania, durante su intervención por
videoconferencia en una reunión convocada en Bruselas, que reflexione
"profunda, pero rápidamente", puesto que Europa debe acelerar sus
esfuerzos por evitar el "contagio". En Roma, Visco, ha apoyado una
intervención en los "mercados de valores y directamente a favor de los
bancos, mediante procedimientos más flexibles y menos punitivos para
los países beneficiarios que respeten las normas".
El portavoz de Asuntos Económicos de la Comisión Europea,
Amadeu Altafaj, ha reiterado hoy que existen medios de rescate para la banca,
pero que cualquier actuación de este tipo "pasa por negociar un
programa de rescate de la economía española, aunque fuera muy focalizado
sobre un sector concreto".
También ha instado al Gobierno español a que presente cuanto antes el
plan de capitalización para Bankia: "Lo que no se puede hacer es
mantener esta incertidumbre. Nadie puede esperar que a la luz de estos
resultados negativos de algunas entidades bancarias los mercados
reaccionen con euforia. Por lo tanto cuanto antes se eliminen
incertidumbres, mejor", ha señalado Altafaj en declaraciones a Radio
Nacional de España.
La prima de riesgo italiana está siendo penalizada por las amenazas a
la estabilidad que sacuden la eurozona desde los diversos frentes
abiertos: la crisis en Grecia y la vulnerabilidad del sector financiero.
Hoy ha iniciado la jornada en 466 puntos, ha cedido hasta 453 para
cerrar después en 469.
Sin embargo, el euro ha marcado hoy un mínimo anual al cambiarse a
1,2337 dólares, su cotización más baja desde el 1 de julio de 2010. A lo
largo del día ha recuperado terreno y al final del día se intercambiaba
a 1,2376 dólares.
E
l Banco Central Europeo (BCE) saltó ayer a la palestra
para rechazar la posibilidad de canalizar la recapitalización de Bankia
con una emisión directa de deuda, una posibilidad que el Gobierno
español había contemplado, aunque ayer el ministro de Economía, Luis de
Guindos, aseguró que no se había presentado plan alguno ante la
autoridad bancaria.
Hoy, el presidente del BCE, Mario Draghi, ha afirmado ante el
Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo que
el Gobierno español actuó de la "peor manera posible" con Bankia, puesto
que se subestimó el problema, igual que hizo Bélgica con Dexia, y pidió
"mecanismos creíbles" para la recapitalización de las entidades.
El temor a que España acabe por necesitar un rescate internacional,
en la estela de sus vecinos periféricos, no se aleja. Grecia pidió ayuda
el 23 de abril de 2010, con una prima de riesgo en 559 puntos básicos
en las jornadas previas y el tipo de su bono a 10 años en el 8,83%.
Irlanda pidió ayuda el 22 noviembre de hace dos años: diez días antes su
prima de riesgo alcanzó los 646 puntos, con la rentabilidad del bono en
el 8,89%. A Portugal le bastó rebasar los 500 puntos a principios de
abril para, en el plazo de cinco días, pedir el rescate. Los inversores
exigían un 8,76% a sus bonos a 10 años.